Seis personas resultaron heridas tras sacudida en pleno vuelo que obligó a un avión a aterrizar de emergencia en Nigeria

Cuatro pasajeros y dos tripulantes resultaron heridos el viernes cuando un vuelo de United Airlines de Lagos, Nigeria, al Aeropuerto Internacional Dulles de Washington experimentó un movimiento repentino en el aire, según United Airlines.

Un video tomado por pasajeros muestra el caos a bordo, con bandejas, comida y otros objetos esparcidos por el suelo del avión.

El vuelo 613 realizó un aterrizaje de emergencia de regreso en Lagos, donde las seis personas heridas a bordo fueron llevadas a un hospital cercano, dijo la aerolínea. Todos han sido dados de alta desde entonces, informó a CNN la portavoz de United Airlines, Leslie Scott.

No está claro qué causó el sacudón en el aire; United Airlines ha dicho que la causa no fue una turbulencia grave y que está “trabajando con las autoridades de aviación en EE.UU. y Nigeria para entender la causa”.

Los datos de vuelo accedidos desde FlightRadar24 muestran que el vuelo 613 descendió abruptamente desde la altitud de crucero aproximadamente 93 minutos después del despegue.

El mismo avión, volando de Lagos al Aeropuerto Internacional Dulles de Washington, fue desviado previamente el martes, según FlightRadar. Los datos de altitud de ese vuelo mostraron un descenso rápido de 1.000 pies (casi 305 metros) aproximadamente 89 minutos después del despegue. No está claro si las desviaciones del UA613 están relacionadas.

El vuelo del viernes transportaba a 245 pasajeros, ocho asistentes de vuelo y tres pilotos, de acuerdo con United, que dijo que actualmente está trabajando para colocar a los pasajeros en otros vuelos.

El Director de Asuntos Públicos y Protección al Consumidor de la Autoridad de Aviación Civil de Nigeria, Michael Achimugu, confirmó el incidente, según la estatal Radio Nigeria, enfatizando que no hubo víctimas mortales. Aseguró que los pasajeros habían sido alojados en hoteles, informó también Radio Nigeria.

El incidente del viernes involucró un Boeing 787, que fue objeto de revisión por parte de la Administración Federal de Aviación de EE.UU. tras un descenso en el aire de un vuelo de Latam Airlines en marzo pasado. En ese incidente anterior, los investigadores encontraron que un asiento de piloto del vuelo se había movido hacia adelante y hacia la columna de control del avión, causando que la nariz del avión descendiera.

Días después del incidente de Latam Airlines, Boeing envió un aviso a las aerolíneas que operan el Boeing 787 recomendando que inspeccionen los interruptores de los asientos de la cabina en los aviones.

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